En la mitología nórdica, la hidromiel ( también llamada aguamiel ) constituía el único alimento de Odín. Esta bebida se obtenía de una mezcla de miel y agua y los novios la consumían con el objetivo de recibir la bendición de los dioses, quienes según el mito, le otorgaban una buena fertilidad a la apareja, sobre todo en lo referente a la concepción de hijos varones.

En la cultura babilónica: se tenía por costumbre que el padre de la novia ofreciera cerveza de miel a su yerno como dote o regalo de bodas, ofreciéndole dicha bebida durante una luna ( un mes ).

En la Antigua Roma: donde era común que la madre de la novia colocase una vasija llena de miel dentro de la alcoba nupcial en la noche de bodas. ésta simbolizaba la fertilidad y a su vez cumplía una función energizante para los recién casados. Los teutones de la edad media bajo la influencia de la mitología germana, celebraban los casamientos únicamente en noches de luna llena y los novios debían beber licor de miel durante los treinta días posteriores, con el fin de asegurarse la dicha matrimonial y una descendencia numerosa.

Algunos dicen que el origen de esta expresión viene del siglo XVI, con la venida de la primera luna posterior a la boda. Se dice que durante este período de tiempo era costumbre que los recién casados tomasen hidromiel, bebida que aparentemente aumentaba la fertilidad. Así, el primer mes después de la boda, pasó a conocerse como la famosa¨ luna de miel ¨

 En costumbres de la burguesía inglesa del siglo XIX, los recién casados solían viajar -luego de efectuado el matrimonio -, con el propósito de visitar a aquellos parientes que por algún motivo no habían podido concurrir a la celebración.

                                                                                       Fuente: revistademisantojos.blogspot.com